Es claro que el futuro de la agricultura no se puede lograr sin herramientas digitales y un fuerte impulso de la innovación tecnológica. Con la creciente concientización de los consumidores sobre los problemas medioambientales y la necesidad de gestionar mejor los recursos disponibles, los conceptos de trazabilidad, calidad y control están cobrando fuerza en toda la cadena de valor alimentaria.
De esta forma, términos como drones y sensores, Internet de las cosas, big data, inteligencia artificial, automatización y servicios en la nube han comenzado a colonizar áreas agrícolas y de producción de alimentos que hasta hace unos años eran plenamente abarcadas por la mano humana y/o por tecnologías alejadas de la transformación digital. Este patrón ha dado lugar a la aparición de la agricultura 4.0, una noción que incorpora la evolución de la agricultura de precisión y hace referencia a todas las acciones que se llevan a cabo en la agricultura a partir de un análisis preciso y exacto de los datos y la información recopilada y transmitida a través de herramientas y tecnología avanzadas.
El uso de soluciones 4.0 en agricultura significa, entre otros, evitar despilfarros innecesarios calculando las necesidades hídricas exactas de las siembras, detectar con antelación la aparición de determinadas enfermedades o plagas de las plantas y animales, tener un mayor control sobre los costos de producción, poder planificar todas las etapas del cultivo, siembra y cosecha con mucha precisión, ahorrando tiempo y dinero, y mejorar la trazabilidad buscando una cadena de suministro corta capaz de producir alimentos de alta calidad de manera sostenible con poco margen de error.
La consideración de estas ventajas hace que sea tentador pensar en que las mejoras en productividad del agro vendrán dadas por la adopción en masa de tecnologías de última generación que realicen los pequeños productores, industrias alimenticias y comercializadores agropecuarios. Sin embargo, esta postura es cuando menos utópica si no está enmarcada en una estrategia de especialización inteligente marcada por la dinamización sectorial que fortalezca el ecosistema innovador en el que se desenvuelven los actores de la cadena de valor. Esta es en sí la verdadera receta para que las regiones vean un verdadero auge sostenido de su sector agrícola.
La muestra más clara de lo dicho la da la región de Andalucía en España y su hub de innovación digital, Andalucía Agrotech. Este es un espacio comprendido como el instrumento principal para desarrollar estrategias tecnológicas y de transformación digital en el agro. Concebido por entidades gubernamentales, universidades, centros tecnológicos y empresas del sector agroalimentario, Andalucía Agrotech supone un ecosistema donde diferentes actores con intereses en el desarrollo digital del sector convergen.
De esta manera, al interior del hub las universidades y centros de investigación se encargan del desarrollo de servicios tecnológicos para el sector productivo, y suministrar acceso y capacitación en el uso de las tecnologías de la industria 4.0, al tiempo que las entidades sectoriales se ocupan de identificar a las empresas y sus necesidades a nivel tecnológico. Por su parte, el gobierno regional lidera el impulso y la coordinación de acciones de la plataforma de innovación.
Estos esfuerzos sinérgicos han dado paso a un entorno de innovación regional con alto valor agregado y de referencia internacional, soportado en la conexión de todos los recursos del sector bajo una plataforma única, la facilidad de acceso de todas las empresas del ámbito agroalimentario a la cultura digital, el fomento de alianzas estratégicas, la creación de valor compartido, y la promoción de un catálogo de servicios especializados y enfocados a las necesidades sectoriales.
Actualmente Andalucía Agrotech cuenta con más de 120 miembros implicados en el desarrollo digital del agro, impulsado desde la cuádruple hélice, con programas y servicios consolidados, y proyectos líderes en la Unión Europea.
La apuesta liderada desde Visionarios Magdalena alrededor del foco agrotech en el departamento se acoge a esta perspectiva, dejando de lado el enfoque en productos y fijando la apuesta en cadenas de valor impulsadas por estrategias con visión global, innovadora y transformadora.
¡Con visión estamos transformando al Magdalena!
